Senda del Chorro

En el corazón de la península ibérica, en pleno Parque Nacional de Cabañeros... la biodiversidad de los Montes de Toledo se abre paso a las rutas, senderos y grutas que recorren lugares inhóspitos repletos de una inigualable belleza paisajística, donde la fauna y flora autóctona son los indiscutibles protagonistas de la serranía manchega cuya atalaya más alta es el Pico del Rocigalgo.

El Parque Nacional de Cabañeros, se encuentra situado en los Montes de Toledo, al noroeste de la provincia de Ciudad Real, ocupando también una zona del suroeste de la provincia de Toledo. Está limitado al Este por el río Bullaque y al Oeste por el río Estena, abarcando los macizos de El Chorito y Rocigalgo, así como las sierras de Miraflores y La Celada; al sur queda la Raña de Santiago.

Enmarcado en el termino municipal de Los Navalucillos y configurado por un bosque mediterráneo donde encinas y pinos junto a acebos, abedules y tejos, el entorno presenta un relieve accidentado; entre los 650 y los 1.448 metros, la vegetación mediterránea se ve evolucionada a través de los sucesivos periodos climáticos: alcornoque, quejigo, madroño, labiérnago, cornicabra, castaño, nuez negra, arraclán, arce... Todos ellos cobijando a las más hermosas de las criaturas; ciervo, corzo, jabalí, cabra montés, mirlo acuático, águila calzada, águila culebrera, águila imperial, buitre leonado y buitre negro.

La senda del Chorro, el salto de agua más vivo, lleno de vida y repleto de actividad faunística. Un recorrido donde el paso del tiempo se aprecia a simple vista; el bosque mediterráneo da paso al ripario y este... a la flora procedente de épocas subtropicales de hace más de 70 millones de años hasta testigos de la última glaciación. Humedad constante. relieve abrupto; laderas, predizas, riscos... pequeñas dehesas, rañas, atalayas... Espectáculo natural en un enclave privilegiado.

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