Crepuscular tragedia de honor que oculta una profunda reflexión sobre el poder,la justicia, la responsabilidad, el amor y el deseo, ambientada en dl contexto político de las ciudades-estado enfrentadas em la convulsa Italia de finales del quattrocento. El castigo sin venganza, que bajo la dirección de Helena Pimenta y la adaptación de Álvaro Tato dan vida junto con la Compañía Nacional de Teatro Clásico en el madrileño Teatro de la Comedia.
En el prólogo a la edición de 1634, el propio Lope calificaba su obra de tragedia escrita al estilo español, dando fe a la singularidad de un texto dramático que, décadas después, un editor portugués subtitularía "Cuando Lope quiere, quiere"; todo un indicio del asombro y admiración que ha provocado a lo largo de los siglos para lectores y espectadores.
La propia directora aclama la obra como "desoladora, hermosa y magistral". Una puesta en escena acompañada de las voces del coro clásico teatral formado por Anna Maruny, Fernando Trujillo, Alejandro Pau e Iñigo Álvarez de Lara.
Se dice de Lope de Vega, cuyo nombre de pila Lope Félix de Vega Carpio, con respecto a su obra "EL castigo sin venganza", que la obra bebe de tres indispensables fuentes historiográficas. El primero, hecho histórico, se remonta a 1425 bajo el reinado de Nicolo III d´Este. El segundo, las Novelle de Mateo Bandello, que recoge un total de 214 novelas de las cuales 14 fueron traducidas al castellano por Vicente de Millis en una edición aparecida en Salamanca en 1589. Finalmente, la última se trata de la propia Biblia, que teniendo en cuenta la importante influencia cultural bíblica del propio Lope, la originalidad de la obra teatral en tragedia es la reinterpretación de la historia de David.
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