La cultura del vino con nombre propio, una familia donde los valores que priman son el entusiasmo y la dedicación... ¿Cómo no podría ser otra? La Rioja, mucho más que el propio vino, lugar donde se enmarca uno de los santuarios de prestigio más importantes de esta gran localización vinícola. Un sueño hecho realidad, Vivanco, situado en la localidad riojana de Briones.
Mucho más que vino, cultura, experiencias... una forma de vida reflejo del compromiso familiar, en el que hay que devolverle al vino lo que éste nos ha dado. Arte, gastronomía, seducción ,sabor, emoción... sensaciones de la vida ante el terruño con autenticidad y personalidad.
"Si la gastronomía es una experiencia, también lo son el sonido de una copa en un curso de cata, el aroma del vino oculto en la oscuridad de una visita a la bodega. El viaje misterioso a través de la cultura del vino en un recorrido por el museo... El vino tocado, sentido, vivido (...) Una forma diferente, exclusiva e inolvidable de enamorarte del vino"
Caldos de máxima expresión, sensaciones únicas de la mano de la Familia Vivanco; cariño, ternura, cuidado y respeto a la viña y su fruto. Valores que avalan la calidad y excelencia de sus vinos caracterizados por su dinamicidad, carácter, personalidad y gran complejidad; taninos, auténticos exigentes de la singularidad.
Muchos son los puntos de convergencia del medio natural con el hombre, pocos son los sueños realidad donde el ser humano se deje llevar por la naturaleza, pese a configurarla, y formar parte del equilibrio. Un progreso donde la innovación va ligada al transcurso natural de la vida, donde familia, vino, cultura y sociedad descubren juntos el sentir del vino desde el principio de los tiempos. ¿Alguna vez has descubierto la historia de la cultura del vino?
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