Tres culturas, un imperio, el esplendor de la época... la belleza que atesora; Toledo, enmarcado en un lugar de cuyo nombre si quiero acordarme, donde el tiempo se detiene por completo para mostrarnos el arte en estado puro, tal como lo conocieron nuestros antepasados. Calles, muros, plazas, jardines... un abanico de diversidad multi cultural donde la arquitectura es el perfecto aval de la singularidad artística imperial.
Testigo de pueblos y civilizaciones, puesto que convivieron juntos judíos, musulmanes y cristianos... que incluso... siglos atrás, los celtas se organizaron en un asentamiento en el actual conocido monte del Bú.
Un recorrido sin precedentes en el que la cultura abraza los monumentos más importantes del imperio; Real Colegio de las Doncellas Nobles, Iglesia de los Jesuitas, Monasterio de San Juan de los Reyes, Antigua Mezquita - Cristo de la Luz, Iglesia de Santo Tomé, Iglesia del Salvador, Antigua Sinagoga - Santa María la Blanca.
Real Colegio de Doncellas Nobles |
Comenzamos este paseo por la historia en una maravilla del siglo XVI; Colegio de Nuestra Señora de los Remedios, también denominado de las Doncellas Nobles, Fundado por el Cardenal Siliceo y como copatrono el monarca de la Casa de los Austrias Felipe II. Institución, iglesia, sepúlcro del Cardenal Siliceo, Patio, salón Rectoral... un conjunto monumental de fachada de ladrillo, puertas barrocas y un relieve labrado por el escultor Juan Bautista Vázquez.
Cinco siglos de historia que atesoraron a lo largo de los años hasta poco más de la segunda mitad del siglo XX dos de las obras de El Greco; "San Francisco y el hermano León meditando sobre la muerte" y "Cristo en la Cruz".
Iglesia de los Jesuitas |
De la Compañía de Jesús, Orden religiosa fundada por Ignacio de Loyola en 1534... configura el lienzo toledano el ejemplo único del barroco más importante del Imperio; Iglesia de los Jesuitas. fue en 1558, con el Arzobispo Carranza, cuando se instaló la Orden Jesuita en la villa imperial contando con iglesia y casa profesa.
Después de que se finalizara su construcción en 1765 bajo las órdenes de José Hernández Sierra y la posterior expulsión de los Jesuitas con la Orden de Carlos III... Con el pasar de los años, ya en el siglo XX, concretamente en 1903, el Beato Cardenal Sancha autoriza el regreso de los Jesuitas recuperando la Iglesia de San Ildefonso.
Claustro San Juan de los Reyes |
Construcción gótica castellana, el lugar preferido por Isabel de Castilla y Fernando El Católico para ser enterrados... Monasterio lleno de magia y culto, mandado construir por los Reyes Católicos en acción de gracias por la victoria en la Batalla de Toro en el año 1476. Fue Isabel, quien por su predilección a San Juan Evangelista bautizó este templo como Monasterio de San Juan Portalatyna, después San Juan de la Reina, hasta la actualidad a denominarse San Juan de los Reyes.
Desde 1486, con la llegada del Cardenal Cisneros, que ya vivían algunos religiosos, hasta el día de hoy, este monasterio ha sido y es casa de los frailes de la Orden de los Franciscanos. Escultura sin igual en su interior, en el que se observa en el claustro alto el escudo de armas de la Corona de Castilla con el águila nimbada de San Juan Evangelista.
Cristo de la Luz |
Uno de los monumentos más antiguos de Toledo, avalado por siglos de historia, y que en la época fue uno de los edificios más emblemáticos de la fusión cultural musulmana en la ciudad imperial. Se trata de la antigua mezquita Cristo de la Luz, datada en el año 999 de nuestra era y vinculado a la prestigiosa familia Banû I-Hadîdî.
Dice la leyenda que... "se le atribuye al caballo del Cid, en la entrada triunfal en Toledo del Rey Alfonso VI tras la reconquista, el mérito de haberse arrodillado frente a la mezquita y no querer avanzar, en señal de veneración a un Cristo que tras un tabique, alumbrado por una lámpara, había permanecido oculto durante los siglos de la dominación musulmana. Una pequeña piedra blanca, embutida en la calzada de acceso, señala el lugar exacto del prodigio".
"El entierro del Señor de Orgaz" en la Iglesia de Santo Tomé |
En el se encuentra la obra cumbre de El Greco, "El entierro del Señor de Orgaz". Ya del año 1142 se tienen archivos historiográficos de su fundación tras la reconquista cristiana de la ciudad. Iglesia de Santo Tomé, quien Don Gonzalo Ruiz de Toledo, notario de Castilla y Señor de la Villa de Orgaz, dejó en su testamento una donación anual para el sostenimiento de sacerdotes y pobres de la parroquia.
La torre, perteneciente a la iglesia primitiva; la escultura, donde impera la Virgen de la Sonrisa; pintura, donde El Greco culmina su poder artístico... Capillas de la Encarnación, la Dolorosa, La Concepción y la de la Virgen del Monte - Sión configuran el conjunto arquitectónico como una joya de singular belleza del esplendor de la cultura de la ciudad.
Arquería musulmana en Iglesia del Salvador |
Una muestra de la diversidad cultural y social de la ciudad imperial, que en ella han dejado huella desde ilustres personajes a humildes anónimos. Un ejemplo de socialización donde la civilización de todos los tiempos ha convivido con el más absoluto respeto y devoción; Iglesia del Salvador, que en sus restos arqueológicos agrupa los últimos tesoros de lo que fue por aquel entonces la segunda mezquita de Toledo.
Ejemplo medieval toledano, alberga en su interior detalles arquitectónicos tardorromanos y visigodos. Filial a la iglesia de Santo Tomé, esta joya artístico - arquitectónica está configurada por un templo Romano, basílica visigoda, primitiva mezquita, arquería musulmana... Torre de campanas, capilla de Santa Catalina, retablo del siglo XVI... toda una muestra de la belleza histórica de un imperio.
Detalle arquitectónico Santa María la Blanca |
La antigua Sinagoga Mayor de Toledo, actual Santa María la Blanca, belleza auténtica de la judería toledana, de carácter mudéjar. Numerosos estudios apuntan a datar esta maravilla judía en el siglo XII, mandada construir por el consejero y embajador de Alfonso VIII, Abraham Ibn Alfache.
Los partidarios de Pedro I "El Cruel" y los de su hermanastro Enrique Trastámara, dieron lugar al asalto de numerosas localizaciones del barrio judío toledano. Aunque fue antes de la expulsión y conversión judía, se convirtió - y desde entonces mantiene esa denominación - en Santa María la Blanca, por ser la imagen titular la Virgen Blanca, copia de la existente en el coro de la Catedral.
Toledo; ladrillo y piedra que avala la historia en todo su esplendor. Diversidad cultural, social... Un mar de sensaciones que invitan a revivir los pasos de quienes forjaron la leyenda, el misterio y la cultura imperial. Un paseo por las joyas más carismáticas de Toledo que en cada una se encierra la elegancia más singular.
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