Todo vino tiene un período en el que alcanza su plenitud aromática y gustativa. Caldos con diversidad, pero de acentuada personalidad; de eso se trata la maceración carbónica, la elaboración artesanal de vinos que en su proceso tienen pequeños porcentajes de vino tradicional, una parte prensada y otra en la que interviene la microoxigenación, en el que principalmente se acentúa la calidad de la uva y sus propiedades otorgando notas florales, herbáceas y fruta fresca.
Pero todo tiene un nombre, y más tratándose de vinos de la última añada; la fiesta de los alevines de las bodegas. Un año más tiene lugar la décimo sexta edición del Vino Joven, enmarcado en el emblemático y literario hotel madrileño Iberostar Las Letras, en pleno corazón de Madrid.
Altún, una bodega que incorpora el respeto y la gratitud por una tierra riojana que regala grandes vinos. El vino Pródigo, placer sensorial. Fariña; filosofía basada en la tradición, innovación y profundo conocimiento. Fernández Eguiluz, cuyo afán de superación es conseguir la máxima calidad. Insulares de Tenerife, esmero y cuidado de aproximadamente 600 viticultores de la comarca tinerfeña de Tacoronte - Acentejo. Luberri, alma y fuerza de La Rioja. Ostatu; generaciones de constancia y dedicación por la viticultura de calidad. Prada a Tope, equilibrio y persistencia del Bierzo. San Dionisio, conservación y emprendimiento con patrón castellano. Solabal, unión y diversidad de vid y vino. Solar de Urbezo... uva de máxima expresión. Tintoralba; técnica vitivinícola de cuidada elaboración. Un recorrido del vino por las bodegas más representativas en el proceso de la maceración carbónica en nuestro país; Álava, Albacete, La Rioja, León, Tenerife, Zamora, Zaragoza. El máximo respeto por la vid, en el que el zumo de uva intensifica sus aromas.
Comentarios
Publicar un comentario