El corazón del Duero

Adentrarse en la Rivera del Duero es conocer mucho más que una Denominación de Origen, un marco incomparable de singular belleza tapizado por viñedos y regado por el río que le da nombre propio. De repente... una parada en el tiempo, un alto en el camino; una forma de entender la cultura del vino y la gastronomía entre La Vid y Barrios y Aranda del Duero. El concepto de lo tradicional basado en una calidad de vanguardia da origen a Lagar de Isilla, uno de los iconos más importantes de la vitivinicultura de la región.

Enmarcado en una bodega histórica del siglo XV, soterrada, a los pies de una escalinata de piedra y arcos de medio punto, el arte culinario se hace protagonista en la localidad burgalesa de Aranda de Duero. Restaurante asador El Lagar de Isilla, que deja un sabor de boca especial regado por los más exquisitos vinos que de sus entrañas nacen en el santuario.

Bombón Roche de morcilla de Aranda con pimientos y almendra sobre cuna de patatas paja, lomos de sardinas extra ahumadas con endivias y vinagreta de frutos secos y queso de Burgos, Lechazo a la brasa... y un final de contrastes para tildar una jornada gastronómica; Jacuzzi dos chocolates con maracuyá y espuma de chocolate blanco con burbujas crujientes y polvo de oro acompañado de cofre de helado. 

¡Atrevete a soñar!... vivir la realidad de compartir con la persona que más te llena los placeres más intensos en un día tan especial como el de su cumpleaños; Lagar de Isilla, el corazón del Duero, el lugar perfecto donde el arte y la gastronomía alimenta de cariño su interior, porque esa persona tiene algo especial que te hace vivir apasionadamente: TÚ y UN RIBERA, Felicidades.