Editorial |
Fundada en 1950, bodegas Campos Reales es sinónimo de conocimiento, sabiduría... éxito; un equipo que cada década ha sabido expresar en el más alto estándar de calidad vinos para todas las generaciones, siendo su común denominador el compromiso y la sostenibilidad, elaborando para ello, conforme a cada añada la máxima expresión de la viticultura con nombre propio
Cuenca, una zona de gran tradición vinícola que durante más de siete décadas de experiencia ha sabido adaptarse a las nuevas técnicas de elaboración. A lo largo de todo este tiempo, Campos Reales y sus vinos han sabido ocupar un lugar destacado entre los vinos españoles y están presentes en los mercados a nivel internacional.
Enmarcada en el noroeste de la Denominación de Origen La Mancha, Campos Reales, una zona de microclima único arropado por la localidad conquense de El Provencio en el que su viñedo se sitúa en la parte alta de la llanura manchega; inviernos fríos, y veranos cálidos que permiten el equilibrio perfecto de la acidez siendo la gran protagonista la variedad Tempranillo permitiendo su mayor expresión, donde la tierra arcillo calcárea y el clima mediterráneo continental le hacen ser la humilde identidad de los vinos por excelencia de la tierra del Quijote.
Compromiso con la calidad y la sostenibilidad, que siendo premiada por Guía Peñín, James Suckling, Alimentos de Castilla - La Mancha, entre otros, inclusive el Baco de Oro, le hace ser de manera indiscutible el auténtico progreso de la viticultura sin perder la esencia, teniendo como máxima el respeto y la tradición; perfeccionar el vino, es sinónimo de evolución donde el progreso tecnológico adecúa la historia sin perder ni un ápice de su origen, siendo la vanguardia hacia la producción un guiño respetuoso a la modernidad pareja a la artesanía.
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