Navalmoralejo ha resistido al paso del tiempo, ya que Ciudad de Vascos quedó deshabitada en el siglo XII. Esta medina de Al-Andalus fue fundada entre los años 930 y 950 d.C. aproximadamente, en tiempos de Abd-al-Rahman III, como una ciudad colina, establecida en un punto estratégico: en lo algo de un promontorio, a orillas del río Uso o Huso, en la línea fronteriza entre cristianos y musulmanes. Teniendo en cuenta además que fue un centro metalúrgico de cierta envergadura ya que trabajaba el metal procedente de sus inmediaciones así como de los cercanos Montes de Toledo, no es de extrañar que gozara de buena fortuna.
Actualmente supone un yacimiento arqueológico, gracias a las campañas de excavación dirigidas desde 1975 por Ricardo Izquierdo Benito (catedrático de Historia Medieval de la Universidad de Castilla-La Mancha). Es visitable de forma libre y gratuita. Se encuentra dentro de la finca Las Cucañas, y se puede acceder los sábados entre el 16 de mayo y el 31 de enero, de 9:00h a 14:00h. El resto del año permanece cerrado por encontrarse en una zona de cría de la cigüeña negra.
En las antiguas escuelas del pueblo de Navalmoralejo (a unos siete kilómetros) se hizo un centro de interpretación con paneles y recursos audiovisuales que explican la historia de este enclave. Para verlo bastaba con pedir la llave en el bar del frente, pero en el momento de nuestra visita estaba cerrado hasta nuevo aviso. Para cualquier duda, lo mejor es llamar previamente al ayuntamiento en el teléfono de atención al ciudadano 925 43 63 17.
* * *
Comentarios
Publicar un comentario