Entre los 47 camiones inscritos en el Dakar del próximo 5 de enero en AlUla, se espera un choque de titanes entre los pilotos neerlandeses y checos
El vigente campeón, Janus van Kasteren tendrá que defender su título frente a sus compatriotas Martin y Mitchel van den Brink. En el clan checo, las esperanzas de reconquista están depositadas en Ales Loprais y en Martin Macik, a partes iguales
En la categoría de camiones, no se veía a ocho ganadores de etapas diferentes en la misma edición desde su creación oficial en 1999. El pasado mes de enero, en Arabia Saudí asistimos a una carrera particularmente reñida, con cuatro cambios de líder. Al final se impuso Janus van Kasteren, que se consagraba en su quinta participación y volvía a colocar a los Países Bajos y al Team De Rooy en lo más alto del palmarés. Una hazaña que no se producía desde 2016.
Todo apunta a que en la lucha por el podio asistiremos a una confrontación entre los pilotos neerlandeses y los checos, ambos países con varios aspirantes legítimos al título. Entre los neerlandeses, las opciones al título se las reparten los camiones Iveco de los talleres De Rooy y los de Eurol Rallysport. Además del vigente campeón Van Kasteren, todas las miradas de los fans neerlandeses están puestas en Mitchel Van den Brink, que a sus 20 años se alza como el ganador de etapa más joven de la historia de la categoría. Además, terminó el Dakar a pie de podio (4º), justo detrás de su maestro, Martin Van den Brink, que por primera vez saboreaba un tercer puesto en la general. Padre e hijo podrían colarse en todo momento en la cabeza de la carrera entre AlUla y Yanbu el mes que viene. A Anja van Loon le viene de familia y estará al frente del primer equipo 100% femenino en camiones. Gracias a su padre, Fried van de Laar, se inició en el rally-raid de niña y luego siguió formándose con su marido Erik van Loon (4º en 2015 en coches). Por su parte, a Gert Huzink le corresponde el honor la primera victoria de etapa con un camión híbrido en 2023. En esta ocasión intentará participar en la pugna por la victoria final.
Entre los pilotos checos, las fuerzas están aún más repartidas. El candidato más evidente a la sucesión parecería ser el heredero casi directo del seis veces ganador Karel Loprais. Ales, sobrino en la dinastía, dejó la carrera en enero, mientras que lideraba la clasificación general. Inicialmente catalogado más bien de cazaetapas desde su debut en 2007 (11 mejores tiempos en total), el piloto del Praga al que llama “Lady” parece contar con todos los ingredientes necesarios para imponerse y se presentará con la misma determinación que siempre. Hay otro compatriota suyo que también se ha granjeado el estatus de favorito más que creíble. Martin Macik ganaba cuatro etapas en el Dakar 2023, pero más importante aún terminó segundo en la general. Para su décimo Dakar al volante de un camión, el piloto de 34 años intentará culminar su periplo en el Top 10 por séptima vez y, si posible, en el primer puesto.
En el país, los conocedores de la prueba seguirán de cerca a los camiones Tatra del equipo Buggyra, con Jaroslav Valtr y Martin Soltys al volante, quinto y séptimo, respectivamente en la última edición. Con toda probabilidad intentará emularles el japonés Teruhito Sugawara, décimo en 2023, en su decimonovena edición al volante de un Hino. Por último, el mapamundi de los pilotos a los que se debe vigilar se tiene que ampliar a Lituania, que ha entrado en el palmarés de la mano de Vaidotas Paskevicius, ganador de la última etapa disputada en 2023. Tal vez se trata del punto de partida de un nuevo cambio geopolítico en la categoría.
Comentarios
Publicar un comentario